La idea de trabajar la asignatura de Educación Musical a través de una visión Gestáltica,
surge porque la Terapia Gestalt hace énfasis en desarrollar las posibilidades
personales y potenciarlas, con la única intención de recuperar el equilibrio emocional.
La terapia Gestalt también ayuda a desarrollar la creatividad, que es la capacidad que
cada persona tiene para enfrentar problemas, analizar posibilidades, experimentar, tomar
decisiones y finalmente encontrar soluciones originales. Ser creativo/a forma parte de
un proceso muy amplio en el cual participan muchos otros aspectos del desarrollo.
No se trata de una capacidad aislada, sino que se enlaza con otros aspectos de la
personalidad del individuo. La creatividad saca a la luz la personalidad y las
características propias, sin censura, valoración o juicio. Además la creatividad, potencia
el desarrollo de la autoestima, seguridad en uno mismo, empatía y propicia sentirse más
felices a las personas, sin importar la edad: ayuda a manifestar sentimientos, a poner en
palabras las emociones, y a hablar con normalidad de ellas, sintiéndonos aliviados/as y
aprendiendo que además es algo que pueden compartir con los demás con naturalidad.
Podemos decir que, con excepción de la música cantada, toda la demás música, no
genera transferencia. Cuando decimos transferencia nos referimos a que el cliente hace
proyecciones hacia el terapeuta.
Dado que el sonido entra por "la puerta de atrás” es decir por el hemisferio derecho,
tiene un acceso rápido y potente hacia el inconsciente. Ya estando allí genera
movimientos expresados en sensaciones, imágenes, emociones, reacciones corporales,
sentimientos. El enorme poder de la música estriba, como decíamos en un principio, en
la manera y la parte del cerebro en donde se procesa.
Es común darnos cuenta de que la música que relacionamos con algún momento
importante de nuestra vida es capaz de evocarnos o inducirnos a ese estado. Y no sólo
esto, es capaz de llevarnos a contactar con estados de nacimiento y aun más, fetales y
embrionarios.
DEBATE PROFESIONAL, Nº 235 del mes de diciembre 2014-enero 2015, (pag 21-23), en el año 2015